Fumigación en Silos: Técnicas Efectivas para Proteger Granos Almacenados en Ecuador
El almacenamiento de granos en silos constituye una de las fases más críticas en la cadena agroindustrial. Tras la cosecha, el grano deja de estar protegido por su ambiente natural y pasa a depender de condiciones artificiales que, si no son correctamente gestionadas, pueden convertirse en el escenario perfecto para la proliferación de plagas. Insectos, roedores y aves encuentran en los silos una fuente de alimento abundante y un refugio estable que les permite reproducirse con facilidad. El resultado es un riesgo constante para la inocuidad, la calidad y la rentabilidad de la producción.
En este contexto, la fumigación en silos surge como una herramienta esencial dentro de los programas de manejo integral de plagas. A diferencia de las medidas preventivas como la limpieza o el control ambiental, la fumigación tiene un carácter correctivo y curativo: elimina insectos en todas sus etapas de desarrollo —huevos, larvas, pupas y adultos— y actúa de manera efectiva incluso en infestaciones ya establecidas. Sin embargo, su éxito depende de múltiples factores: desde la elección del fumigante adecuado hasta la hermeticidad de la estructura y las condiciones ambientales internas.
La fosfina (PH3) se ha consolidado como el fumigante más utilizado a nivel global por su alta penetración y eficacia, aunque existen alternativas como el dióxido de carbono (CO2) que, en determinadas situaciones, ofrecen ventajas en términos de seguridad ambiental. No obstante, la fumigación no puede considerarse una acción aislada: debe integrarse dentro de un programa más amplio de manejo, que contemple monitoreo, limpieza, control ambiental y medidas preventivas.
En este artículo exploraremos en detalle la importancia de la fumigación en silos, las técnicas más empleadas, los factores que determinan su eficacia y las mejores prácticas para su aplicación segura y responsable. Finalmente, destacaremos cómo Rizobacter se posiciona en Ecuador como un socio estratégico en la protección de granos almacenados, garantizando inocuidad, productividad y sostenibilidad.

¿Por qué es necesaria la fumigación en silos de granos?
Principales amenazas: insectos, roedores y aves
Los silos representan un ecosistema cerrado, pero no impenetrable. Los insectos, en especial gorgojos y polillas, son las plagas más comunes y peligrosas en granos almacenados. Pueden destruir granos enteros, reducir el peso comercializable y generar micotoxinas peligrosas para el consumo humano y animal.
Los roedores, por su parte, no solo consumen grandes volúmenes de grano, sino que lo contaminan con heces, orina y patógenos. Además, su capacidad de roer estructuras metálicas o de concreto compromete la seguridad de las instalaciones. Las aves, aunque menos frecuentes, pueden acceder a silos mal sellados, añadiendo excretas y microorganismos a los granos.
Impacto en la inocuidad y calidad del grano
La infestación de plagas compromete la calidad nutricional de los granos y puede convertirlos en peligrosos para el consumo. Una sola contaminación con Salmonella o E. coli puede llevar al rechazo de lotes completos, afectando exportaciones y certificaciones internacionales.
Riesgos económicos y regulatorios de una infestación
Las pérdidas económicas derivadas de plagas no se limitan al grano consumido. Incluyen devoluciones de exportaciones, sanciones por incumplimiento de normativas de inocuidad y mayores costos de producción por reposición de inventarios.
Efecto de la humedad y la temperatura en los granos
Los insectos prosperan en ambientes con humedad superior al 12%. Asimismo, temperaturas por encima de los 20 °C aceleran su ciclo biológico, aumentando la velocidad de infestación.
Importancia de la hermeticidad de la estructura
Un silo hermético es un requisito fundamental para que la fumigación funcione. Cualquier fuga reduce la concentración del gas y compromete la eliminación de plagas.
Problemas derivados de grietas y residuos de cosechas anteriores
La presencia de polvo, granos rotos o restos de cosechas pasadas ofrece refugio y alimento a las plagas. Del mismo modo, las grietas en paredes o techos se convierten en vías de entrada.

Técnicas y productos de fumigación más utilizados
Fosfina (PH3): alta penetración y eficacia en todas las etapas del insecto
La fosfina es el fumigante más empleado a nivel mundial en silos de granos. Su ventaja radica en su capacidad de penetrar en el interior de los granos y eliminar insectos en todas sus fases.
Otros fumigantes y combinaciones según el tipo de silo
Dependiendo del tipo de grano, el volumen y las condiciones del silo, pueden emplearse combinaciones de fumigantes o productos complementarios. La elección debe basarse en eficacia, costos, seguridad y normativas.
Factores que determinan la eficacia de la fumigación
Tipo de grano y tamaño de partícula
Los granos pequeños, como el trigo, presentan mayor dificultad de penetración para los gases en comparación con granos más grandes como el maíz.
Material de construcción del silo (concreto, metal, madera)
Los silos de materiales porosos, como madera o ladrillo, requieren dosis mayores y tiempos de exposición más prolongados que los metálicos o de concreto sellado.
Tiempo de exposición y concentración del fumigante
El éxito de la fumigación depende de mantener la concentración del gas durante al menos 72 horas, en función del fumigante y las condiciones ambientales.
Buenas prácticas en la fumigación de silos
Preparación previa y limpieza de la instalación
Antes de aplicar cualquier fumigante, es indispensable limpiar el silo, eliminar residuos y sellar grietas.
Monitoreo de la temperatura y humedad interna
Sensores de humedad y temperatura permiten anticipar condiciones que favorecen infestaciones y asegurar la eficacia del tratamiento.
Protocolos de seguridad para operarios y medio ambiente
El uso de equipos de protección personal (EPP), la capacitación del personal y la gestión adecuada de residuos son claves para prevenir riesgos en la aplicación.
Alternativas y medidas complementarias al uso de fumigantes
Control ambiental y sistemas de ventilación
Mantener la humedad por debajo del 12% y temperaturas entre 10 °C y 15 °C reduce el riesgo de proliferación de insectos.
Nebulización e insecticidas de contacto
En algunos casos, la nebulización puede usarse como tratamiento complementario para reducir poblaciones superficiales.
Integración con programas de manejo de plagas (MIP)
La fumigación debe ser parte de un programa más amplio, que combine prevención, monitoreo y control físico-químico.

Experiencia en control de plagas industriales y agrícolas
Rizobacter se ha consolidado en el mercado ecuatoriano como un referente en la gestión integral de plagas en la agroindustria.
Uso de tecnologías certificadas y personal especializado
La empresa emplea fumigantes de eficacia comprobada, bajo normativas internacionales, con un equipo técnico altamente capacitado.
Compromiso con la inocuidad y sostenibilidad de la cadena alimentaria
Más allá de la aplicación de fumigantes, Rizobacter promueve soluciones que garantizan inocuidad, protegen el medio ambiente y aseguran la competitividad de los productores en mercados locales e internacionales.